Aprendiendo de quien más sabe...

Aprendiendo de quien más sabe...

Después de una tarde jugando a profes con su hermana, se acerca a su mamá y le dice: "Mira mami, lo que le estuve enseñando a los niños de mi "clase" (peluques y muñecos varios sentaditos en la alfombra pegados a la pared). Y su mamá le pregunta: "¿Qué están haciendo las niñas del dibujo?". 

Tras una mirada de incredulidad de la niña que no entiende porqué su mamá no lo ve tan claro como lo ve ella, le explica: "Pues es una profe dándole un abrazo a un niño que tiene mocos, para enseñarle a los niños que aunque estén malitos hay que quererse".

Salvando las lógicas medidas higiénicas que indican que no sería el mejor comportamiento para una profesora darle un abrazo al niño sin haberlo limpiado antes, el fondo de la cuestión queda muy claro: No se puede discriminar a nadie por estar enfermo y el cariño es la mejor solución para afrontar los problemas.

Bendita infancia que descubre a los adultos lo importante de la vida.

No hay niño malo

Todos y todas hemos oído alguna vez ese piropo de "niño malo" y yo me pregunto que conseguimos los papás y mamás haciendo una afirmación de tal envergadura? Puede que ni lo pensemos, nos salga innata esa vena de jueces y sentenciemos a nuestros peques sin pensar en las consecuencias.
Parece que una palabra no puede significar nada, pero si lo vemos con perspectiva la cosa cambia.
Cada niño es distinto, cada día es distinto y como tal cada padre también lo es. Lo que un día puede hacernos gracia, otro, puede agotar nuestra paciencia. Tomemos con responsabilidad nuestros actos y nuestras palabras, si nuestro peque ha hecho algo que no está bien, a mi modo de ver, hay que hacérselo saber, como es lógico, pero, es lo mismo decir eres malo que eso no está bien? Es un matiz pero para un niño hay mucha diferencia, ser malo puede ser gracioso, puede convertirme en el centro de atención de la clase y hasta puede darme más de una charla con papá y mamá, qué a veces con sus apretadas jornadas laborales puede llegar a ser un gran logro.
Si optamos por decir "eso no está bien" tampoco es que vayamos a obtener una respuesta inmediata, muy probablemente el peque se nos quede mirando o incluso nos ignore, pero si nos acercamos y le sacamos del ambiente, cogiendo una manita y mirando a los ojos: Eso no se hace... Seguro que a la larga obtenemos los resultados deseados sin gritos, sin implicaciones futuras, sin dar más importancia a los errores; más bien podemos aprovecharlos, utilizarlos y aprender de ellos. Yo personalmente creo que no hay mejor forma de aprender que a través del ensayo error y para ser sincera es lo que intento cada día, aprender a mejorar y crecer juntos.
Y si no hemos hecho las cosas bien, qué mejor que un achuchón para reconfortarnos y sentir que mañana podemos hacerlo mejor? Y si soy un niño que muy frecuentemente hago aquello que me dicen que no debería hacer pienso que más que una sentencia necesito una buena dosis de comprensión, cariño y unos cuantos achuchones de esos que nos dejan sin aire y nos dicen que realmente importamos lo suficiente como para poder levantar la cabeza y decir "mañana lo haré mejor".

Comunidade Educativa

Os pais e as nais, os nenos e as nenas, os mestres, o centro educativo, a sociedade como membros principais da comunidade educativa deberiamos comezar a tomar consciencia da responsabilidade que nos compete.
Os nenos e nenas xa de por sí nacen preparados para crecer en sociedade, dende o minuto cero un recén nado xa ten como prioridade localizar a súa nai, hai estudos que demostran que recoñecen os rasgos faciais e que dende moi cedo son capaces de recoñer emocións. A natureza grazas a plasticidade que nos da, como seres incompletos, dótanos da posibilidade de aprender, de transformar a información en coñecemento.
Os pais e as nais somos os responsables de favorecer a socialización primaria para preparar ós nosos fillos e fillas para a vida en sociedade. Responsables de darlles o amor e a seguridade para que cada día descobran algo novo que os abraie e sorprenda polo recuncho mais inesperado.
Os mestres como guías, apoio, orientadores do coñecemento, non abrumando con información, nin transmitindo saberes intanxibles, senón como encargados do timón dese barco que os alumnos deberían tomar para surcar o mundo que os rodea. Poida que como alumnos non nos percatemos de todo o que un mestre fai por nos, da pegada que deixa na nosa personalidade, sexa para ben ou para mal, non deixan de ser persoas, que tamén poden trabucarse, pero de todo se aprende. Eu mesma gardo recordos, coido que coma todos, dos mestres e mestras da miña infancia. Algúns déronme mostras das debilidades das persoas, outros, da fortaleza do pensamento e a reflexión, e uns poucos, marcaron a miña vida para sempre ensinándome que o traballo con amor deixa de ser traballo e convértese en paixón e felicidade.
Toda a sociedade debe colaborar na labor educativa, non nos preparamos para estar rodeados de individuos alleos, estamos cada día inmersos nun mar de relacións, de contactos, de palabras e xestos. Dende o diálogo e a colaboración pódense achegar tódalas posturas, non para unificar, senón para poder aprender do punto de vista de quen temos enfrente, só coa escoita activa poderemos cambiar o mundo. Só con que antes de facer unha crítica miremos cara o noso interior xa sería un gran paso. Antes de buscar culpables, mirarnos ben nos petos, buscar a nosa responsabilidade, procurar de que xeito podemos mellorar ou evitar os conflictos.
A diversidade, a multiculturalidade, a integración, non serán máis que utopías ata que abramos os ollos e vexamos que a diferenza é un tesouro, as cousas que son distintas enriquécennos. A opinión dos nenos e das nenas, dos pais e das nais, dos mestres, da comunidade ou do barrio, nunca van ser iguais. Bendita diversidade que nos deixa ver todo o que podemos aprender uns dos outros, con apertura de mente e ante todo con respeto. Esa é a mellor lección respetar para poder mellorar.
E aproveito dende xa para manifestar expresamente que cando fago este blog sinceramente pretendo aprender cada día un pouco máis e se transmito nalgún intre a miña opinión persoal sobre algún tema, fágoo dende o maior dos respetos a tódalas posturas.

Segundo día, segundo intento

Y pensaba yo que esto sería más sencillo. Creo que todavía me queda muuuuucho por aprender sobre los blogs. Mis agradecimientos a Cris por su confianza y a Sandri por avisarme de que no se me leía, jiji
Hoy comienzo hablando sobre la importancia de la educación y el aprendizaje significativo.
¿Cómo podemos educar? ¿Cómo lograr que lo que transmitimos quede grabado en esas cabecitas que tanto nos importan? La base para lograr un aprendizaje real, un aprendizaje que logre cambios en el conocimiento y la inteligencia es conocer lo que hay dentro de esas cabecitas. Y diréis ¿cómo se puede hacer eso? Pues creo que es bastante sencillo, observar e indagar qué es lo que importa, qué es lo que les interesa, cuales son sus deseos y necesidades, ya algo de eso señalaba Paulo Freire hace muchos años, cuando nos decía que enseñar exige respeto a los saberes del educando, respeto a la autonomía del ser del educando, exige seguridad, capacidad profesional y generosidad, pero sobre todo ENSEÑAR EXIGE SABER ESCUCHAR.
En el caso de un recién nacido parece obvio que lo principal es partir de lo conocido, partir del lazo de unión de la mamá con el bebé y su entorno. Si me siento seguro puedo aprender, pero para sentirme seguro necesito estar rodeado de amor y un ambiente lo más parecido posible a lo que conozco. De ahí la importancia del vínculo padres-hijo/a, que nace durante el embarazo, y del porteo responsable, que permitan que el bebé se sienta seguro en un entorno lo más parecido posible al útero y lograr así una transición más natural, no es lo mismo llegar a un mundo nuevo sólo en una cuna o un cochecito, que mirar el mundo desde los brazos de las personas que más me quieren y que además me dan todo su amor y calorcito.
Todos tenemos presente que los bebés sienten mucho antes de nacer, pueden recibir estímulos y no me refiero sólo a los externos, si la mamá se siente amenazada o asusta libera hormonas que transmite también al bebé durante la placenta y lo mismo ocurre si la mamá se siente feliz y amada. Por todo ello, papis, si quereis dar mimitos vuestros bebés, ACHUCHAD MUUUUCHO A LAS MAMÁS!!!
Al nacer el bebé busca a su mamá, con ella se siente seguro, son un solo ser. Esto hay que respetarlo mucho, pero mucho mucho más de lo que se hace, no deberíamos consentir que los bebés sean separados de sus mamás, porque para ambos, lo más seguro es estar juntos, piel con piel, escuchándose, oliéndose, besándose. La gran mayoría de los problemas de lactancia nacen por no favorecer el comienzo de la misma dentro la primera hora de vida del bebé y por no asesorar adecuadamente a la mamá durante el embarazo. Dar el pecho no duele, NUNCA, y si se siente dolor es porque algo va mal, las primeras horas el bebé está alerta, busca a su mamá y si se le deja, él mismo puede localizar su pecho y comenzar a mamar instintivamente, porque el subidón de hormonas que recibe durante el parto así lo establece. Con unas gotas de amor, estimulando el pecho, logra que la fábrica inicie la producción y se echa a dormir mientras tanto. Por el contrario, si al nacer es separado de su mamá y no se le ofrece el pecho, puede que después lo rechace fruto del cansancio y el aletargamiento tras el gran esfuerzo de nacer, y no digamos si en el hospital le dan un biberón para que "descanse", que ya es el colmo de todos los males.
Si queremos tener hijos e hijas felices e inteligentes debemos recordar qué es lo que necesitan, alimento, cobijo, calor, pero sobre todo AMOR. Para amar no es necesario grandes riquezas materiales, pero sí tiempo, sí contacto, sí comprensión, sí diálogo y eso no se compra con dinero.
Amar hay que reconocer que tampoco es fácil, la vida de hoy nos lo pone cuesta arriba: el tiempo, ya se sabe, es oro; el contacto, pues cada día hacen unas sillas más monas y se mira con peor cara a las mamás que llevan mucho a sus niños en brazos, porque dicen que se malcrían; la comprensión, no digamos, porque cómo vamos a entender a un ser que no sabe hacer supuestamente nada más que llorar, el diálogo, más de lo mismo, porque hay quien dice que hasta que tiene x meses los bebés no entienden.
Dejémonos de filosofar y escuchar los consejos que nos abruman por todas partes. A los padres, la naturaleza no nos da un libro de instrucciones, pero nos da algo mucho más valioso y completo, el amor de un hijo. Por favor, aprendamos a escuchar, nadie mejor que ellos puede enseñarnos el camino que nos queda por recorrer.
 

De achuchón!

Hoxe estréome nesto dos blogs é como non sei por onde comezar, direi só o que para min significa ACHUCHA EDUCA.
Son a pequena de catro irmáns e sempre lle botei a culpa ou o mérito a iso para describirme como unha mimeliña, unha persoa que sempre busca un mimiño, un bo ACHUCHÓN. Cando me decidín a facer unha carreira universitaria buscaba (dentro das dispoñibles na UNED) algo relacionado coa educación, algo co que convertirme nunha persoa mellor. Así embarquei na aventura da EDUCACIÓN SOCIAL, por iso achucha EDUCA.
Co nacemento da miña primeira filla naceu A CHUCHA, por as dúas chuchiñas que encheron de calor e agarimo á miña nena. O aleitamento cambiou a miña vida xa antes de dar a luz, dende que estaba de catro meses, cando as primeiras pinguiñas de ouro marcaron a miña roupa e a miña persoa. Así comecei a formarme, a ler, a investigar e abraiarme con ese novo mundo descoñecido, do que ata entón tan pouco sabía. E nun suspiro a miña meniña deixou de pedir a chuchi, ou como dicía ela "a cuqui" pola que chamara durante case vinteún meses.
Cinco mesiños despois chegou un novo embarazo e nestas decateime de que tería que achuchar o dobre, porque ademais da miña filla, habería un bebé que tamén querría mimiños da mamá. Con esas descubrín o mundo do achuchón constante, o porteo, da man da web de Red Canguro, abríronse ante min as portas do ceo, achuchar a miña filla maior mentres a pequena mamaba é achuchaba as súas chuchis. Era todo un sentimento de amor, de liberdade e ledicia.
Mentres todo isto ocorría pilloume o tren do Plan Bolonia e seguín na miña viaxe da educación social, aprendendo cousas novas sobre a educación familiar, a educación para a saúde, a educación ambiental, emocional e ata a educación por proxectos.
Sego todavía neste camiño, se cadra este sexa o meu derradeiro ano para me converter en graduada en Educación Social e quen sabe se tamén en asesora en lactancia, pero sexa como sexa, hoxe comeza esta aventura do blog no que será benvida toda persoa que queira axuda ou compaña coa que compartir experiencias de educación, lactancia, porteo, crianza ou o que se preste para poder seguir aprendendo e medrando cada día xuntos.